Antes de explicar cómo podemos desengancharnos del azúcar veremos las principales consecuencias que produce en nuestro organismo.
Antes de explicar cómo podemos desengancharnos del azúcar veremos las principales consecuencias que produce en nuestro organismo.
Cuando hablamos de azúcar nos referimos a ella como glucosa, maltosa, lactosa, sacarosa, fructosa presente de forma natural en los alimentos así como la miel y jarabes, el jarabe rico en fructosa, azúcares refinados añadidos en el procesado, preparación y cocinado de alimentos y en la mesa. Aunque el azúcar intrínseco que es el que forma parte de propio alimento no es equiparable al que añadimos de forma externa o el que está presente de forma artificial en éstos todos podríamos definirlos como azúcares, los cuales según evidencia científica tienen una serie de repercusiones en nuestro organismo entre las que encontramos la resistencia a la insulina o diabetes tipo II. Pero no solo ésta, hay muchas más como son todas aquellas enfermedades asociadas al Síndrome metabólico entre las que encontramos:
- Cardiopatías
- Sobrepeso y Obesidad
- Algunos tipos de cánceres como el de páncreas
- Deterioro renal
- Hígado graso -sin consumo de bebidas alcohólicas
- Disfunción endotelial
- Inflamación silenciosa
- Estrés oxidativo
- Enfermedad renal
- Poliquistosis ovárica.
Cuando el azúcar llega a sangre, el páncreas libera insulina, la hormona que abre la puerta al azúcar para entrar en las células, una vez dentro, algunos se consumen para producir energía, mientras que otros se almacenan en el músculo o hígado en forma de glucógeno, la glucosa que no se utiliza como fuente inmediata de energía ni para almacenarse como glucógeno se convierne en grasa.
La fructosa es un azúcar simple, presente en la miel, las frutas y el azúcar de mesa (sacarosa), y es la que les confiere su sabor dulce. La mayor fuente de fructosa a nivel mundial es el azúcar de mesa. En 1970 se introdujo en el mercado el jarabe de alta fructosa de maíz, edulcorante ampliamente utilizado en la actualidad.
A diferencia de la glucosa, la fructosa no genera una respuesta pancreática de producción de insulina, con lo cual algunos autores la han recomendado como una forma saludable de endulzar los alimentos. Sin embargo, la fructosa consumida en grandes cantidades puede ser incluso más lesiva que la glucosa. Cabe decir de entrada que el consumo de frutas, debido al aporte de fibra, nutriente y fitoquímicos diversos no genera los efectos deletéreos que en seguida describo para la fructosa purificada o refinada.
La fructosa puede generar resistencia a la insulina ( y por lo tanto SM) por varías vías:
- En el hígado y otros tejidos ( músculos, etc.), la fructosa promueve la acumulación de triglicéridos, lo cual a su vez disminuye la respuesta celular a la insulina y genera resistencia a la leptina.
La elevación del ácido úrico, que es otro de los efectos del hiperconsumo de fructosa, también puede producir resistencia a la insulina.
Algunos piensan que pueden disminuir el consumo de azúcar optando por los llamados edulcorante artificiales para endulzar los alimentos, sin embargo lo que ellos no saben es que la ingestión de estos tipo de substancias producen las siguientes repercusiones en nuestro organismo:
- Aumento del apetito , debido a que estos edulcorantes artificiales no tienen ni azúcar ni calorías, con lo cual los procesos metabólicos no se activan como, las hormonas que producen la sensación de plenitud tampoco se activa, y el cerebro no recibe la señal de dopamina que se libera por el azúcar.
- Por otro lado se discute que los edulcorantes no poseen un poder saciador como el azúcar, inclusive podrían causar la sensación de hambre estimulando a comer en exceso, además podrían estimular los receptores del gusto, creando adicción al sabor dulce.
- Modificaciones en las poblaciones bacterianas que componente la microbiota intestinal, pueden contribuir al proceso inflamatorio crónico.
De una forma u otra tanto el azúcar refinado como los edulcorantes artificiales ocasionan tanto graves enfermedades como descompensaciones en nuestro organismo, con los cual será ideal aprender a reducir estas cantidades optando por endulzantes naturales como el propio alimento.